Presentación del estudio de riesgos gratuito para empresas Autoforma que clemente Lorenzo Arcas expuso en el programa Autoforma al día del pasado 27 de Septiembre
Lo que no se mide no se gestiona
Medir la presencia del riesgo en las empresas es un reto complejo. La falta de información impide una gestión racional de los elementos consustanciales a una empresa, y el riesgo es uno de ellos.
En 2013 MAPFRE creó Empresas 360°, una iniciativa que facilita a la empresa su gerencia de riesgos, proporcionándole una métrica y un análisis completo sobre su nivel de riesgo, además de las claves para mejorar la gestión de los mismos.
Empresas 360°, además, permite a las empresas conocer su cobertura del riesgo en relación con su sector de actividad y respecto a la media nacional evaluando, comparando y posicionando a cada empresa de forma personalizada.
En 2014 MAPFRE publicó el primer Estudio Empresas 360º, cuyas conclusiones sobre las necesidades aseguradoras de la empresa española y su grado de cobertura se ven consolidadas en este nuevo Estudio, que ha sido elaborado utilizando de forma agregada y confidencial la información de todas las empresas que han participado en la iniciativa Empresas 360º desde el comienzo de la misma.
Con este Estudio, MAPFRE quiere contribuir al incremento de la competitividad de la empresa española, a través de una mejor identificación y gestión de los riesgos empresariales.
¿Qué es el Riesgo?
Se entiende por riesgo ‘la contingencia o proximidad de un daño’, también como ‘cada una de las contingencias que pueden ser objeto de un contrato de seguro’.
De acuerdo con la definición anterior, es evidente que el concepto de “riesgo” afecta a cualquiera de las actividades que podemos desarrollar en nuestro día a día, bien sea a nivel individual, o a nivel colectivo. Para el propósito de este Estudio, nos centraremos en los riesgos derivados de las actividades que se realizan en nuestras empresas.
El riesgo es algo consustancial a la actividad empresarial. Precisamente es su existencia lo que fundamenta el concepto de beneficio empresarial, porque para conseguir su objetivo el empresario debe asumir riesgos, siendo el beneficio el premio alcanzado por haber podido satisfacer las necesidades de los consumidores después de sortear dichos riesgos.
Estos riesgos pueden ser clasificados en dos grandes grupos:
Riesgos de negocio:
Son aquellos relacionados directamente con las decisiones empresariales. El hecho de iniciar una nueva actividad, de lanzar un nuevo producto, construir o alquilar unas nuevas instalaciones, etc., implica una toma de decisiones cuyas consecuencias son desconocidas y, por lo tanto, no seguras. En este caso, se están asumiendo los riesgos derivados de la posibilidad de equivocarnos y así alcanzar resultados que no se corresponden con los objetivos previstos. La materialización de los riesgos de negocio, puede dar lugar a ganancias o pérdidas en la cuenta de resultados de la empresa.
Riesgos puros o accidentales:
CONSTANTE EVALUACIÓN Y MEJORA
Independientemente de que la empresa haya tomado decisiones de negocio acertadas, este acierto estará condicionado por la existencia o no de hechos imprevisibles que constituyen los accidentes. Se define el riesgo puro o accidental como la incertidumbre de la ocurrencia de un hecho negativo y de la gravedad de los daños que pueda producir. La empresa deberá tomar todas las medidas necesarias para intentar evitarlos o, al menos, para reducir sus posibles efectos que siempre son negativos.
Al conjunto de estas medidas lo denominamos Gerencia de Riesgos.
Extracto de la presentación de Lorenzo Arcas en Autoforma al día del 27 de Septiembre de 2018
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